Intento Golpista Fallido de PRIAN y Piña contra Claudia Sheinbaum.

29/08/2024

Intento Golpista Fallido de PRIAN y Piña contra Claudia Sheinbaum..- En el ejercicio del poder, existen diversas formas de ejecutar un golpe de Estado.

Una manera de arrebatar el poder a quien legalmente lo ostenta, en este caso, a quien lo había ganado de acuerdo con la determinación de las autoridades electorales.

A pesar de que en México se cuenta con un Instituto Electoral y un Tribunal Electoral, la dirigencia del PRIAN, junto con Norma Piña, intentaron una chicana jurídica (acción legal por la cual se pretende acceder a un derecho que no se tiene).

De haberla consumado, se hubiera desatado el tigre, el león y cualquier otra bestia imaginable. Un verdadero zafarrancho se hubiera armado. La oposición intentó ingresar una acción de controversia de criterios electorales a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, es decir, saltando de la Sala Superior del Tribunal Electoral, que es la instancia electoral, a la instancia constitucional.

Hasta aquí, todo hubiera sido hasta cierto punto normal. Digo hasta cierto punto, dado que no se llevaba un litigio que hubiera llegado a la Sala Superior y que hubiera generado esta contradicción de criterios como para acudir a la SCJN a que lo dirimiera. Sin embargo, se intentaron adelantar a un criterio que la oposición sabía que tendría la Sala Superior con relación a la sobrerrepresentación, y lo sabe muy bien la oposición porque ellos lo impulsaron.

Efectivamente, el criterio de sobrerrepresentación permite que cada partido pueda tener hasta un 8% de sobrerrepresentación, es decir, más diputados de los que ganó en las urnas, a través de los diputados de representación proporcional, o mejor conocidos como plurinominales.

Este criterio busca evitar que un partido tenga una representación desproporcionada en la Cámara de Diputados en comparación con el porcentaje de votos que recibió en las elecciones, asegurando así una representación más equitativa y un equilibrio en el poder legislativo.

Resulta que Morena ganó el 85% de los distritos de mayoría, es decir, de los diputados que todos elegimos el día de la votación. Morena y sus aliados ganaron el 85%, es decir, 256 de los 300 distritos electorales, mientras que la oposición (PRI, PAN, PRD y MC) apenas ganó 44 distritos en todo el país. Con este resultado, la oposición intentó adelantarse a un criterio que sabía que la Sala Superior del Tribunal Electoral aplicaría, buscando así una ventaja indebida a través de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

La situación se ha vuelto más compleja debido a la decisión de la ministra Norma Piña de admitir una controversia en un tiempo récord de menos de 48 horas, cuando normalmente se tardaría un mes en determinar qué sala se encargaría del caso.

El ministro González Alcántara Carrancá, responsable de la contradicción de criterios 231/2024, aclaró que la resolución no afectará las decisiones del TEPJF sobre la validación de elecciones de senadores y diputados federales. “La Sala Superior es la única autoridad con la facultad de revisar la asignación de diputaciones o senadurías por el principio de representación proporcional. Por lo tanto, no puede haber duda de que yo seré el primero en observar y respetar esta competencia específica”, afirmó el ministro de la Corte.

Además, esta situación se enmarca en un contexto de tensiones entre el Poder Judicial y el Ejecutivo. La ministra Piña ha sido blanco de críticas por integrantes del partido Morena, periodistas e intelectuales, quienes han interpuesto recursos en su contra por supuestos conflictos de interés. Estas tensiones se han agravado con la propuesta de reforma judicial del presidente Andrés Manuel López Obrador, que pretende que los jueces y ministros de la SCJN sean seleccionados mediante voto popular que al parecer ha llevado a la ministra a perder la objetividad e independencia del asunto colocando sus intereses personales por encima de la ley y la constitución.

Debemos recordar que hace varios meses, el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá fue el centro de atención tras organizar una cena secreta en su lujosa residencia en Lomas de Chapultepec. La exclusiva reunión, que tuvo lugar en Paseo de la Reforma, contó con la presencia de la ministra Norma Piña y otros altos mandos del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).

Lo que desató la polémica fue la asistencia de Alejandro “Alito” Moreno, líder del PRI, quien se unió a la velada en un momento crítico para la política mexicana. La cena se llevó a cabo justo un día después de la renuncia del magistrado Reyes Rodríguez Mondragón como presidente del TEPJF, lo que levantó sospechas sobre posibles acuerdos y maniobras políticas detrás de puertas cerradas.

Los rumores no se hicieron esperar, y muchos se preguntaron qué se discutió en esa noche de confidencias. ¿Se trató de una simple cena entre colegas o de un complot para influir en las decisiones judiciales? La falta de transparencia y la presencia de figuras políticas clave dejaron a la opinión pública en vilo, esperando respuestas claras sobre los verdaderos motivos de esa misteriosa reunión.

En un giro inesperado, el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá ha sorprendido a muchos con su reciente postura sobre la impugnación presentada por el PAN respecto a la sobrerrepresentación en la Cámara de Diputados. Este cambio de postura ha sido tan significativo que incluso el presidente Andrés Manuel López Obrador, conocido por sus críticas al Poder Judicial, ha reconocido públicamente la posición del ministro.

Esta postura echa por la borda las esperanzas del PAN de pensar quela SCJN podría intervenir y tratar de darles en la mesa lo que no ganaron en las urnas mediante acuerdos que pretenden cambiar las reglas del juego que ellos mismos (PRIAN) propusieron, aprobaron y usaron en diversos procesos electorales en 2015, 2018, 2021 y ahora en 2024 que al perder con tan amplia ventaja ya no les gusto y quisieran cambiar pero a estas alturas del juego ya no es posible.

En el pecado llevan la penitencia

Cabe resaltar que la oposición en el pecado lleva la penitencia, dado que la reforma electoral del plan A de Andrés Manuel López Obrador justo proponía que se cambiara el modelo electoral por una representación pura, eliminando 200 diputados y solamente dejando la mayoría de acuerdo a la cantidad de votos emitidos por partido hasta llegar a los 300 diputados.

Pero fue justo el PRIAN los que se opusieron y dejaron la ley como esta desde 2014 por iniciativa de ellos mismos, lo que no esperaban es que la paliza fuera de estas magnitudes.

En las elecciones federales de 2024, la oposición logró ganar un total de 44 distritos electorales. Partido Revolucionario Institucional (PRI): Ganó 15 distritos¹, Partido Acción Nacional (PAN): Ganó 20 distritos¹, Partido de la Revolución Democrática (PRD): Ganó 1 distritos¹ y Movimiento Ciudadano (MC): Ganó 4 distritos¹, sin embargo a pesar de que solo gano 44 distritos es decir 44 diputados con los plurinominales obtendrán 135 diputados, logrando así el triple de los que ganaron por votos directos.